Raúl recupera el olfato goleador y el Mirandés gana

Goles: 1-0, m. 45: Raúl García.

Árbitro: El murciano Sánchez López amonestó al rojillo Barbu (m. 35) y a los visitantes Luismi (m. 40), Costas (m. 51), Moro (m. 90) y Montoro (m. 91).

Incidencias: 3.133 espectadores en Anduva , con presentación de los equipos de fútbol base, de la liga '+Que Goles' y con cerca de 200 oviedistas. Los porteros vistieron de negro en homenaje a Iribar en su 80 cumpleaños.

El Mirandés volvió a la senda de las victorias. Lo hizo gracias a un tanto de Raúl García. El pichichi recuperó el olfato goleador y el conjunto rojillo ganó para sumar 37 puntos y superar en la clasificación a su rival, el Oviedo.

La principal novedad en la disposición del bloque de Etxeberria se produjo en la línea defensiva. Beñat se ubicó esta vez como tercer central, por el perfil diestro, junto a Álex Martín y Barbu. Se buscaba una buena salida de balón en asociación con Gelabert y Oriol Rey, quienes ocuparon la medular.

La primera gran ocasión corrió a cargo del bando local: el centro de Juanlu al segundo palo fue proyectado por Salinas al punto de penalti, pero Roberto López remató a las nubes cuando se encontraba en una óptima posición para marcar. El dominio era mirandesista. Los jugadores salieron convencidos de sus posibilidades y muy metidos en el partido. Con más determinación e ideas que en las últimas semanas. El Oviedo, mientras tanto, no salía de su campo. El control era absoluto de los rojillos, con triangulaciones y asociaciones al borde del área que los visitantes no podían abortar. Faltaba puntería. No la tuvo Salinas cuando remató alto un balón despejado al borde del área.

El cuadro carbayón no pasó a terreno rojillo hasta el minuto 26. A punto estuvo de hacer gol tras el lanzamiento de un córner. Pinchi no acertó a despejar y Dani Calvo, a la media vuelta, remató con mucha intención. Entre Herrero y el larguero impidieron el gol de los de Cervera.

El Mirandés lo había hecho todo hasta ese momento, tuvo la pelota, en ocasiones hasta se empleó con buen juego, pero el disparo más peligroso lo realizó el Oviedo. Y en su segundo acercamiento, en el 36, pidieron penalti, que el VAR no vio.

El choque enfilaba ya el descanso, pero antes volvió el mejor Raúl, con una jugada marca de la casa que sirvió para adelantar a los rojillos en el minuto 45, siempre importante por el valor anímico que tiene conseguirlo justo antes de ir a los vestuarios. El '9' recibió por dentro, controló en carrera, se fue de su par y cruzó fuera del alcance de Braat. El pichichi jabato se reencontró con el gol en una acción de gran delantero.

Los de casa habían hecho mucho más para irse con ventaja en el marcador y lo lograron ante un adversario que solo salió en dos ocasiones de su campo, aunque estrelló un balón en la madera.

Muy mal lo tuvo que ver el preparador del bloque asturiano porque tras el descanso introdujo tres cambios: se incorporaron Masca, Costas y Montoro. Quien avisó primero, sin embargo, fue Gelabert con un lanzamiento con mucha intención que se fue por encima del travesaño.

Los ayer de blanco y verde iban perdiendo, de tal manera que dieron un paso hacia delante, lo que propiciaba las transiciones de los mirandesistas. A poco que fueran precisas en el último pase podían generar mucho peligro.

Mientras el entrenador del Oviedo efectúo cuatro cambios, el local continuó con la misma idea. Una internada de Bretones, no fue concretada por Montoro en boca de gol. Herrero se hizo con el esférico. El encuentro estaba ahora mucho más abierto, si bien los rojillos se mostraban imprecisos en el último pase, cuando se situaban en las inmediaciones del área rival. Faltaba ese poso, un punto de tranquilidad.

Manu García fue el primer recambio a falta de poco más de veinte minutos para reforzar la medular y entorpecer el juego de los visitantes. Álvaro Sanz, otro mediocentro pero de diferentes características a las del vitoriano, el segundo.

Aguantaba el equipo la victoria por la mínima pese a que pudo aumentar la cuenta. Pinchi remató muy defectuoso con la zurda. Estaba en una inmejorable posición, próximo al área pequeña. Después, Salinas chutó flojo.

Faltaban las fuerzas a algunos efecivos para culminar el resultado, entre ellos a Pinchi, sustituido por Jofre en el tramo final. Al menos, no pasaba apuros en defensa. Le sirvió para amarrar el triunfo, muy importante porque le permite llegar a los 37 puntos e, incluso, superar al Oviedo en dos.