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Ángel Garraza
Jueves, 20 de abril 2023, 14:21
El cuadro visitante este domingo en Anduva está por encima en la clasificación, con cinco puntos más que los rojillos. Se sitúa en la octava plaza mientras que el Mirandés es decimosexto. Sin embargo, las dinámicas en la segunda vuelta, desde que arrancó el presente 2023, son diferentes. El Burgos se mantiene en la pelea por acabar en el sexto puesto (está a cinco puntos del Albacete) pero no es menos cierto que su trayectoria ha ido en línea descendente tras protagonizar un notable inicio del curso.
Tal es así que si se contara la trayectoria de unos y otros en el segundo tramo de competición, a partir del mes de enero, el equipo de Miranda estaría por delante de su oponente. Es el duodécimo clasificado en este periodo de tiempo, una vez que el bloque se compenetró y empezó a 'carburar'. Los blanquinegros, por su parte, ocupan posición de descenso porque se sitúan en la decimonovena en la fase decisiva del campeonato.
Marcan la zona roja este año. Y es que han perdido la solidez defensiva de la que hacían gala en el inicio de temporada. Han obtenido sólo 15 puntos porque únicamente han logrado tres victorias, ante Andorra (2-1), Real Oviedo (1-2) y Racing de Santander (2-1); completa el calendario con seis empates y seis derrotas, dos más que en toda la primera vuelta cuando todavía faltan por disputarse seis jornadas para terminar la segunda mitad del campeonato.
Contabiliza, ahora de media, un punto por jornada. Está empatado con la Ponferradina y por delante del Ibiza, con 13 puntos. El Lugo, con seis, sería el colista también en esta segunda vuelta. Por su parte, Albacete y Cartagena, miembros de la Liga de Segunda División con los que se disputa la sexta plaza, la última que da derecho a jugar por el ascenso a través de las eliminatorias, estarían mucho más arriba.
Tienen más problemas atrás
Así queda reflejado cuando se comprueba que han encajado 16 goles en 15 partidos, frente a los 11 que recibieron en toda la primera vuelta (seis encuentros más que ahora). También han experimentado más dificultades en este tiempo al no ser un bloque que se caracterice por dominar los partidos proponiendo con balón. Cuando ha tenido que llevar el peso ha pasado por muchos más apuros para sumar.
En la primera ronda acabó cuarto; los de Etxeberria, decimoquintos. Eran nueve los puntos de ventaja a favor de los foráneos este fin de semana. Ahora, la distancia es de cinco.
El Mirandés ha sumado cuatro puntos más que su adversario desde enero; ha conseguido seis tantos más (17) y el registro donde es peor es en los tantos en contra, con dos más (18/16). El saldo, en total, de dianas de los jabatos es de -1 y el de su oponente, de -5.
Michel Zabaco, central del Burgos, es quien ha hablado por parte del cuadro visitante acerca del partido que acogerá Anduva el domingo. Por todos estos motivos, y por lo que supone un duelo de rivalidad provincial, huye de favoritismos. No quiere colgarse esa etiqueta.
«No nos vemos como favoritos. Vamos fuera de casa y sabemos que cuesta mucho ganar. Es un partido muy especial, pero favoritismo ninguno». Considera que el derbi es un partido distinto. «Da igual la dinámica. Son partidos especiales. Tanto a la gente como al club y a los propios jugadores nos hace una ilusión especial. El Mirandés hace las cosas muy bien en su campo y con la victoria en el campo del Levante han cogido puntos que los hacen estar desahogados».
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